Revista europea de historia de las ideas políticas y de las instituciones públicas


ISSN versión electrónica: 2174-0135
ISSN versión impresa: 2386-6926
Depósito Legal: MA 2135-2014

Presidente del C.R.: Antonio Ortega Carrillo de Albornoz
Director: Manuel J. Peláez
Editor: Juan Carlos Martínez Coll


Rafael Ramis Barceló, Derecho natural, historia y razones para la acción. La contribución de Alasdair MacInyre al pensamiento jurídico, Madrid, Universidad Carlos III, 2012, 480 pp.

Antonio Planas Rosselló

RESUMEN: El presente libro, «Derecho natural, historia y razones para la acción. La contribución de Alasdair MacIntyre al pensamiento jurídico», recoge un análisis detallado, en seis capítulos, de la obra de MacIntyre, filósofo que presenta múltiples facetas, entre las que destacan el estudio del Derecho natural y de la Historia del pensamiento jurídico. Este libro recoge en esencia la tesis doctoral de Ramis Barceló defendida en la Universitat Pompeu Fabra.

PALABRAS CLAVE: Derecho natural, Historia del pensamiento político, Alasdair MacIntyre, Antropología jurídica, Historia del Derecho, Universidad Carlos III, Universitat Pompeu Fabra.

Alasdair MacIntyre es un filósofo que presenta múltiples facetas. Entre ellas, el estudio del derecho natural y de la historia del pensamiento jurídico. En los últimos años, no son pocos los iusfilósofos, los antropólogos del derecho y los iushistoriadores que se han interesado por su obra. De hecho, el grueso de las reflexiones de MacIntyre sobre el derecho se encuentra en la primera década del siglo XXI, de modo que la cuestión es de máxima actualidad.
Sin embargo, ya en los años cincuenta y sesenta se hallan reflexiones sobre la teoría de la acción, la causalidad y el derecho, y es incluso posible seguir un itinerario de la construcción de su teoría del derecho natural, tanto histórica como sistemáticamente. Ésta es la senda que propone Rafael Ramis en su libro, que recoge la producción de MacIntyre desde los años cincuenta hasta 2010.
Rafael Ramis Barceló es profesor ayudante de la Facultad de Derecho de la Universitat de les Illes Balears. Se ha especializado en la historia del pensamiento jurídico, con algunas incursiones tanto en la filosofía jurídica, como en la historia del derecho y en la historia institucional. Sobre MacIntyre ha publicado varios trabajos, aunque éste es el más denso y profundo.
Se trata de un libro que recoge, con algunas modificaciones, su tesis doctoral en Derecho. Es un trabajo muy detallado, de recopilación de datos, de discusión, análisis y crítica que puede resultar árido para su lectura seguida, pero sumamente interesante para su consulta, pues en él son pocas las cuestiones candentes de la historia, de la metodología y de la filosofía del derecho que quedan sin tratar.
Como es el primer trabajo de síntesis que estudia el derecho en MacIntyre (en un sentido amplio), el autor ha preferido una visión diacrónica que le ayuda a corroborar su teoría de fondo, aunque la obra sea más densa y espesa. Para estudiar en profundidad a este pensador de Glasgow es necesario un buen dominio no sólo de la filosofía, de la historia y del derecho, sino también de la política, de la sociología y de la teología, y ciertamente Rafael Ramis encara su obra con la amplitud de miras pertinente.
En el libro se sostiene, en contra de lo que mantiene el pensador escocés, que MacIntyre tiene un planteamiento protoaristotélico desde joven y que su aristotelismo posterior, acentuado después de su conversión al catolicismo no se opone a su visión inicial. Indica también Ramis que MacIntyre no tiene una única teoría del derecho natural, sino un conjunto de hipótesis muy plausibles, pero que a veces no son compatibles entre sí.
Para justificar sus tesis, el autor establece un recorrido desde los años cincuenta, comentando cada libro, artículo o recensión de MacIntyre con respecto al derecho. De esta forma, logra demostrar que en MacIntyre ha existido siempre un proyecto unitario, que se prolonga desde los comienzos de su carrera intelectual hasta nuestros días.
Ramis detalla cómo MacIntyre se centra en sus primeros años en la ética analítica y en el problema de las razones para actuar. Percibe un divorcio entre la ética griega, que tenía razones teóricas para la acción y la razón moderna, que es incapaz de proporcionarlas. Busca la solución en el marxismo y en diferentes lugares, aunque acaba prefiriendo siempre la respuesta aristotélica.
La crítica de las sociedades contemporáneas le lleva a estudiar el derecho, corroborando que la falta de razones para actuar y de principios éticos compartidos da lugar al incremento de la litigación y a la proliferación legislativa, algo que no ocurría en las sociedades del pasado. Todas estas indagaciones llevan a MacIntyre a preocuparse por la historia jurídica. El descubrimiento de la radical historicidad del ser humano y del derecho le lleva a configurar la idea de las “tradiciones filosóficas”.
En este sentido, MacIntyre sostiene que todas las personas están insertas en una tradición histórica en la que incardinan sus actos y su pensamiento. Y es en el seno de estas tradiciones donde el ser humano puede explicar su propia actuación y contextualizarla. Para él, el aristotelismo es la tradición que mejor explica las razones para actuar del ser humano y la que permite una transición desde ellas hasta la propia actuación histórica, materializada en el derecho.
En este sentido, MacIntyre, al historizar las tradiciones filosóficas, también historiza las tradiciones jurídicas y muestra nuevas perspectivas para la historia del derecho. En particular, su discusión de la idea de derechos humanos, como sustituto inaceptable del derecho natural es una contravención a la historicidad misma del concepto. MacIntyre permite corroborar las contradicciones del “absolutismo jurídico” moderno y la ficción de la Modernidad, algo que ligaría sus teorías con las de autores como Paolo Grossi o Antonio M. Hespanha. Así, resulta muy atractivo su análisis del tránsito de un derecho consuetudinario, ligado a la existencia de unas creencias morales compartidas, a la actual proliferacón legislativa, fruto de la una ausencia de acuerdos morales básicos.
MacIntyre cree que la tradición aristotélica supera los retos de la modernidad, que se configuran a través de una antropología kantiana que se despega de lo natural. Desde Kant, mediante el sujeto trascendental, se pierde de vista el sujeto empírico, con sus pasiones y sus dudas, su comunidad y su historia. Para MacIntyre conviene regresar a la antropología aristotélica para establecer unas razones para la acción que liguen a la persona con la naturaleza y con la sociedad. La vía para hacerlo es el derecho natural.
De esta forma, la tradición aristotélica porta en sí misma una senda de historia del derecho natural que se opone a los derechos humanos y al Estado-Nacional como formas artificiales de entender la relación del ser humano con la sociedad y la naturaleza. MacIntyre propone a las pequeñas comunidades como forma de expresión de una antropología más acorde con la propia realidad natural del ser humano.
En esta visión antropológica, Santo Tomás supera las ideas del propio Aristóteles y ofrece, según MacIntyre, una explicación satisfactoria de la antropología del ser humano, con sus pasiones, su historicidad, sus razones para actuar y su derecho natural. De esta forma, mediante una remisión a la teología, se completa un itinerario que representa la búsqueda de las raíces históricas del derecho acorde con la naturaleza humana. Sin embargo, el problema no acaba aquí, sino que MacIntyre propone una teoría del derecho natural no racionalista, de modo que busca emparentar su visión no tanto con Santo Tomás, sino con Wittgenstein y Hart. Para el pensador escocés el derecho natural tiene que ser conocido y reconocido por las personas corrientes, de manera que en él tiene mucha importancia la costumbre. De aquí que MacIntyre se interese por el derecho consuetudinario como statu quo social y natural.
A la postre, MacIntyre acaba sosteniendo una postura muy original y ecléctica que Rafael Ramis se encarga de examinar detalladamente y de discutir en un diálogo final muy valiente y que deja en entredicho la coherencia de algunos planteamientos del pensador escocés. Realmente, la tesis muestra algunos de los problemas de sistematización de MacIntyre, alabando, valorando y criticando con precisión su obra, difícil de encarar y abordar.
Lástima que no se hayan traducido los textos comentados del inglés al español, algo que haría mucho más cómoda la lectura del libro. Sería asimismo muy deseable que se tradujeran algunos de los artículos jurídicos más significativos de MacIntyre, pues resulta sumamente difícil acceder a algunos de ellos y muchos lectores lo agradecerían.
Se trata, en definitiva, de un libro en el que se encuentra un análisis detallado y paciente de la obra de MacIntyre, examinado con objetividad en los seis capítulos de exposición y discutida con valor en el capítulo final, de debate, en el que se inicia una revisión crítica de la obra del filósofo que seguro que dará mucho juego en el futuro a los estudiosos del derecho.



Nota bene:
Si necesita algún tipo de información referente al artículo póngase en contacto con el email suministrado por el autor del artículo al principio del mismo.
REVISTA EUROPEA DE HISTORIA DE LAS IDEAS POLÍTICAS Y DE LAS INSTITUCIONES PÚBLICAS es una revista académica, editada y mantenida por Revistasdederecho.com. La revista dejó de depender de la Universidad de Málaga en noviembre de 2013 y de www.eumed.com en noviembre de 2020, fecha en la que se conformó www.revistasdederecho.com. Para cualquier comunicación, envíe un mensaje a mjpelaez@uma.es, seghiri@uma.es o info@revistasdederecho.com.